EL CONFLICTO EN LA PAREJATodos anhelan un hogar donde vivir con tranquilidad, y muchos lo desean contando con un matrimonio que reporte compañía calma, placer y comprensión. Donde la vida en pareja sea a la medida de los deseos, y donde predomine alegría. Se anhela contar con alguien con quien consultar las dudas, sentirnos amparados y acompañados. Tener alguien a nuestro lado a quien expresar sufrimiento, preocupación, y se puedan tomar decisiones en conjunto. Una pareja así, es también la vía para hallar la tranquilidad. La pareja matrimonial comparte la vida, cama, futuro, conviven bajo un mismo techo., Es una fusión permanente, y desde luego, se ponen a prueba las diferencias de opinión y costumbres, los deseos y sentimientos. La relación conyugal puede estar dada por un amor apasionado, por deseo sexual, o por cariño y adaptación madura, donde uno es imprescindible al otro. Se puede originar en apasionado amor, sin ninguna intención carnal, u originarse a través de la intención sexual. También la decisión de unión puede ser mediada por el razonamiento de "quien mejor nos conviene", surgiendo después el amor en forma paulatina. En muchos casos la unión se consolida de tal manera que a la pérdida de uno le sigue el otro en un corto tiempo. De hecho esto se observa en el reino animal, como por ejemplo, en algunas especies de aves si falta su pareja el otro muere.Pero, por el contrario, la unión conyugal también puede ser mantenida a lo largo del tiempo por la costumbre de la convivencia, por sentir lástima hacia la pareja, temer a la soledad que acecha después del abandono, por temer el efecto en los hijos que causaría la separación, o por vislumbrar dificultades financieras a partir de ese momento. De cualquier manera, no puede existir la unión de pareja si no surgen discordias, al menos mínimas. El conflicto es inherente al matrimonio, este siempre estará acechando. Sin embargo, eso no se excluye el vivir feliz si se saben prevenir, manejar y solucionar los problemas dentro de la pareja.