Tener un hijo que sufre trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) presenta un conjunto único de desafíos para los padres. Los niños que tienen TDAH suelen tener dificultades para regular sus emociones, mantenerse organizados y concentrados y controlar sus impulsos. Debido a esto, pueden surgir desacuerdos con respecto a las tareas, las tareas del hogar y el comportamiento. Este libro proporciona un marco para trabajar juntos para ayudar a su hijo a desarrollar habilidades importantes a través de las cualidades conocidas como autocontrol, compasión, colaboración, constancia y celebración que se analizarán a lo largo del libro. Usted puede pasar de enemigo de su hijo a amigo si aprende a controlar sus propias reacciones, comprende la experiencia de su hijo e incluyelo en la búsqueda de soluciones, el mantenimiento de acuerdos y el aplauso de los esfuerzos. Tu hijo no se comporta así a propósito, lo prometo. Sus procesos mentales son distintos entre sí. Con la ayuda de algunas técnicas, aprenderá cómo guiar a su hijo para que aproveche sus habilidades únicas y, al mismo tiempo, cultive las habilidades que necesita para prosperar. Este enfoque empático da como resultado una mayor cooperación y confianza. Es esencial comprender qué constituye el TDAH. Aunque se considera un diagnóstico relativamente nuevo, se ha descrito en escritos médicos durante más de 100 años, con mayor frecuencia como hiperactividad en hombres jóvenes. Es bien sabido que personas de todas las edades y de ambos sexos pueden sufrir trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH). El campo de la medicina moderna reconoce que el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es un problema de base biológica que afecta las funciones ejecutivas del cerebro. Las funciones ejecutivas son habilidades esenciales para completar tareas, gestionar emociones y prestar atención. Investiguemos algunas de estas funciones ejecutivas y las acciones que guían ellas. Una de las funciones ejecutivas más importantes es la inhibición, definida como la capacidad de pensar antes de actuar o hablar. Da a las personas la capacidad de controlar sus sentimientos y perseverar en situaciones frustrantes o ansiosas. Iniciar y finalizar tareas, especialmente aquellas que requieren organización y control del tiempo, requiere el uso de funciones ejecutivas, que también son necesarias. Debido a que estos sistemas están dañados en los niños con TDAH, esto puede contribuir a la desorganización, así como a dificultades para iniciar o completar tareas, lo que puede hacer que el manejo de los síntomas del TDAH sea más desafiante. La capacidad de su hijo para regular la energía y la concentración se ve afectada por el TDAH, lo que ejemplifica el elemento de "déficit de atención" del diagnóstico. Independientemente de la importancia de las tareas, puede resultar difícil para las personas concentrarse en ellas porque contienen menos estimulación química. La memoria de trabajo es otra función extremadamente importante. El temido efecto “en un oído, sale por el otro” puede ser causado por el TDAH porque puede afectar la forma en que se almacenan y recuperan los recuerdos. Tenga en cuenta que su hijo no participa intencionalmente en estas acciones, ya que esto es lo más importante a tener en cuenta. Lo importante es tener una serie de pautas a seguir para ayudar a sus hijos a aprender las habilidades necesarias para trabajar con sus propios cerebros únicos, no contra ellos, para convertirse en adultos felices y funcionales.